Ella aboga abiertamente por la violencia contra las minorías y está buscando nuevos reclutas. Con el colapso del ejército de Kiev y la creciente difusión de la narrativa de la traición occidental, el horror infligido a los residentes de Donbass durante una década puede llegar muy pronto a nuestras ciudades.

Por KIT KLARENBERG , The Grayzone.

Centuria, una facción neonazi ucraniana ultraviolenta, ya se ha establecido en seis ciudades de Alemania y está tratando de ampliar su presencia local. Según el diario alemán Junge Welt, el crecimiento de la organización nazi “no se vio obstaculizado por los servicios de seguridad locales”.

Junge Welt remonta los orígenes de Centuria a una cumbre neonazi en agosto de 2020 "en el borde del bosque cerca de Kiev. Allí, un ultranacionalista llamado Igor “Tcherkas” Mikhailenko llamó a los “cientos de combatientes justicieros, en su mayoría enmascarados” que eran miembros de la fascista Milicia Nacional de Kiev a “hacer sacrificios por la idea de una ‘Gran Ucrania’”. Como exjefe de la División Kharkiv de los Patriotas neonazis de Ucrania y comandante del Batallón Azov patrocinado por el estado de 2014 a 2015, Mikhailenko ha expresado su deseo de "destruir todo lo antiucraniano".

Junge Welt informa que la Milicia Nacional ha estado “practicando una brutal justicia vigilante” en toda Ucrania desde 2017, incluida la “tiranización de la escena LGBTQ ”. Posteriormente, Centuria fue culpada de un horrible ataque en noviembre de 2021 contra un club nocturno gay en Kiev, en el que sus activistas atacaron a los juerguistas con porras y gas pimienta.

Ahora la misma secta neonazi tiene “una rama en Alemania”, reveló Junge Welt. El 24 de agosto de 2023, el 32.º aniversario de la independencia de Ucrania, Centuria convocó una "manifestación nacionalista" en el centro de Magdeburgo, "sin ser molestada por Antifa ni por los informes críticos de los medios".

Los participantes posaron con orgullo con la bandera de la Organización de Nacionalistas Ucranianos ( OUN ), fundada por el colaborador nazi de la Segunda Guerra Mundial, Stepan Bandera. Centuria se jactó en ese momento en Telegram: “Aunque los jóvenes ucranianos no están en su tierra natal, están empezando a unirse. Mientras tanto, amenazaron a los "enemigos" de su país con una "tormenta infernal" y prometieron que los "emigrantes ucranianos" no olvidarían su identidad nacional por unos cientos de euros.

Junge Welt informa que Centuria está "actualmente recaudando fondos para la unidad de combate de su organización matriz", comandada por Andriy Biletsky , el famoso fundador del Batallón Azov, quien declaró en 2014 que la misión de la nación ucraniana es "unificar las razas blancas de el mundo para liderar una cruzada final... contra los subhumanos liderados por los semíticos. En casa, los miembros de Centuria expresan actitudes similares hacia los musulmanes, los africanos y los homosexuales, llamándolos el “califato alemán”, “violadores negros” y “pedófilos”, respectivamente.

Ahora los miembros del grupo están trabajando duro para transmitir su visión ideológica a los futuros racistas de todo el continente. “¡Estamos creando una nueva generación de héroes!”, presume el canal Telegram de Centuria. En consecuencia, el grupo neonazi organizó excursiones a las montañas alemanas de Harz con una asociación de exploradores nacionalista ucraniana llamada Plast. Plast ya había fundado grupos locales en la comunidad de exiliados ucranianos en todo el mundo occidental en la década de 1950. Además del adoctrinamiento ideológico, los jóvenes de Plast pueden tener la oportunidad de mejorar su condición física y recibir entrenamiento militar. Como explica ominosamente Centuria en Telegram: “La gente libre tiene armas”.

A medida que Washington retira gradualmente su apoyo a la guerra de Ucrania contra Rusia, ha comenzado a ceder la responsabilidad de gestionar la campaña militar -y su probable fracaso- a los alemanes. Si los envíos de armas estadounidenses siguen disminuyendo, Alemania se convertirá en el principal proveedor de armas de Kiev. Y los alemanes podrían descubrir que un “no” a Ucrania les traería sorpresas desagradables.

A diferencia de Estados Unidos, Alemania no disfruta de una barrera oceánica entre ella y los guerreros fascistas que patrocina en Ucrania. Después de que la tan publicitada contraofensiva de Ucrania finalmente fracasara a finales de 2023, su presidente Volodymyr Zelenskiy murmuró una amenaza velada en una entrevista con The Economist: "No hay manera de predecir cómo reaccionarían los millones de refugiados ucranianos en los países europeos ante su país". ser impugnado queda en la estacada”. Si bien los ucranianos se han portado "bien" en general y están "muy agradecidos" con quienes los han acogido, no sería una "buena historia" que Europa "arrincone a estas personas", señaló Zelensky al periódico.

Para comprender cómo elementos más radicales de una fuerza proxy agotada podrían volver sus armas contra los gobiernos occidentales que las armaron, basta con mirar los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001.

Una red nazi secreta apoyada por Occidente

Si bien Centuria depende en gran medida de los inmigrantes ucranianos como reclutas, también se beneficia de una estructura arraigada de apoyo de la elite europea. En septiembre de 2021, el Instituto de Estudios Europeos, Rusos y Euroasiáticos ( IERES ) de la Universidad George Washington publicó un informe detallado y profundamente inquietante que documenta cómo Centuria contaba con el apoyo de una autoproclamada orden secreta de oficiales militares "tradicionalistas europeos". Esta organización tiene el objetivo declarado de transformar el ejército del país según los aspectos jurídico-ideológicos y defender la "identidad cultural y étnica" de los pueblos europeos frente a los políticos y burócratas de "Bruselas".

IERES informó que el ala militar de Centuria comenzó a entrenar en 2018 en la Academia del Ejército Nacional Ucraniano ( NAA ) Hetman Petro Sahaidachny, la "principal instalación de entrenamiento militar de Kiev y un centro clave para la ayuda militar occidental al país".

El periódico reveló: "En abril de 2021, [Centuria] afirmó que sus miembros habían participado en ejercicios militares conjuntos con Francia, el Reino Unido, Canadá, Estados Unidos , Alemania y Polonia desde su lanzamiento".

De hecho, muchos miembros del grupo neonazi se entrenaron en la base de facto de la OTAN en Yaworiv, ​​a pocos kilómetros al este de la frontera con Polonia.

Además, “el grupo afirma que sus miembros sirven como oficiales en varias unidades del ejército ucraniano. Desde al menos 2019, Centuria ha... pedido a miembros ideológicamente alineados de la AFU que busquen reasignación a unidades específicas en las que sirven los miembros del grupo. Para atraer nuevos miembros, el grupo continúa promoviendo su supuesto papel en las AFU y el acceso a programas occidentales de entrenamiento, militares y de intercambio a través de su canal Telegram con más de 1.200 seguidores y un robot de movilización dedicado.

Todos los gobiernos occidentales con los que contactaron los investigadores del IERES afirmaron que no toleraban a los neonazis en sus fuerzas armadas e insistieron en que “confiaban en que el gobierno ucraniano seleccionaría e identificaría a los candidatos adecuados para sus programas de entrenamiento”. Pero la Academia Nacional del Ejército de Ucrania, Hetman Petro Sahaidachny ( NAA ), ha declarado explícitamente que no realiza ese tipo de filtrado, al tiempo que niega que Centuria opere desde su cuartel general.

Después de que el autor del informe pidió a Centuria y a la NAA comentarios sobre el entrenamiento neonazi, los activistas del movimiento extremista comenzaron a limpiar sus huellas en línea y desde entonces han ocultado sus actividades en el mundo real.

Los medios occidentales han ignorado casi por completo el informe del IERES , salvo un único artículo en el Jerusalem Post. El silencio que rodea el tema es aún más inusual dadas las credenciales de su autor, un ciudadano ucraniano que vive en Washington DC, cuyo trabajo ha sido respaldado por la agencia gubernamental estadounidense Voice of America y el "open source" financiado por los gobiernos de Estados Unidos y el Reino Unido. Se ha publicado el grupo de investigación Bellingcat.

Entre los funcionarios occidentales, sólo las Fuerzas Armadas canadienses han comentado las conclusiones del informe, meticulosamente documentadas. Absurdamente, afirmaron que miembros de Centuria publicaron fotos en Facebook con intención manipuladora de provocar “desinformación rusa”.

Dada la bien documentada historia de entrenamiento de fascistas ucranianos endurecidos por parte del ejército canadiense y su negativa a repudiar a los nazis ucranianos, esta deshonestidad no es sorprendente.

Hasta el día de hoy, el líder del ejército canadiense, el general Wayne Eyre, continúa negándose a disculparse por haber ovacionado de pie a Jaroslaw Hunka , un colaborador nazi de la Segunda Guerra Mundial que fue honrado por el Parlamento canadiense.

Los combatientes de Centuria en Ucrania han pasado al menos los últimos cinco años adoctrinando a sus camaradas de alto poder en el neonazismo, dicen los investigadores. El informe del IERES afirma que Centuria "pudo hacer proselitismo de la futura élite militar de Ucrania dentro de la NAA ".

Retrato de un neonazi formado en Gran Bretaña

Subrayando el alcance de la penetración neonazi en los aparatos militares occidentales , el cadete de la NAA Kyrylo Dubrowskji asistió a un curso de formación de oficiales de 11 meses en la prestigiosa Real Academia Militar británica en Sandhurst en 2020. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania celebró su graduación, mientras que la NAA publicó un perfil en vídeo de 12 minutos del camino del nuevo graduado hacia el liderazgo militar. IERES señaló que Dubrovsky "mostró un gran interés en los asuntos de Centuria" mientras asistía a la academia.

Dubrowskii parece haber relatado un vídeo promocional de Centuria distribuido en Telegram en mayo de 2020, en el que los miembros del grupo marchan por Lvov, asisten a un evento de la NAA y disparan sus armas. Se oye a Dubrovsky entonar: “Nuestros oficiales están formando el nuevo ejército de Ucrania... Nosotros somos los Siglos. Estamos en todas partes... defendiendo vuestros territorios, vuestras tradiciones hasta la última gota de sangre."

Un mes antes, Centuria publicó una entrevista con un "cadete de las Fuerzas Armadas de Su Majestad" anónimo, una descripción que sólo encajaba con una persona: Dubrowskii. Dejó en claro que prefería entrenar en Ucrania porque el entrenamiento británico para oficiales militares "pone menos énfasis en la teoría". Durante este tiempo, Dubrovsky disfrutó de acceso a los cadetes extranjeros que asistían a la academia y "acompañó a delegaciones extranjeras que visitaban la academia en varias ocasiones", incluidos cadetes de la Fuerza Aérea de los EE. UU. y el ejército francés.

No está claro cuánta “teoría” aportó Dubrovsky a las rutinas diarias de los soldados occidentales con los que se cruzó en Sandhurst. IERES concluyó que “Dubrovsky y Centuria explotaron su condición de cadete de Sandhurst” para promover el grupo y su ideología. En la sección "Acerca de" de su canal personal de YouTube, Dubrowskij se describe a sí mismo como un "cadete de la Real Academia de Gran Bretaña". Allí publicó varios vídeos sobre sus experiencias en la academia y al menos un mensaje en el que expresaba su deseo de unirse al Regimiento neonazi Azov.

En un telegrama de diciembre de 2020, Centuria dejó claro que infiltrarse en los rangos más altos del ejército ucraniano era solo el primer paso de una guerra relámpago ideológica mucho más amplia: “Centuria está formando una élite militar única cuyo objetivo es alcanzar los rangos más altos dentro del ejército. fuerzas logran convertirse en un núcleo autoritario capaz de ejercer una influencia significativa. Después de consolidar su influencia sobre el ejército, el grupo planea penetrar en las filas de la “élite política de Ucrania” para “llevar a cabo cambios sociales”. ___

El texto fue publicado en The Grayzone el 8 de abril de 2024 .