UNIDAD Y LUCHA DE LOS CONTRARIOS

 

La ley de la unidad y lucha de contrarios es la médula y esencia de la dialéctica materialista. Por oposición a la metafísica, la dialéctica parte del criterio de que las cosas y los fenómenos de la Naturaleza llevan implícitas contradicciones internas, que son la fuente del proceso de desarrollo. Mientras examinamos las cosas en forma estática, cada una aisladamente, no tropezamos con las contradicciones que llevan en sí. Pero apenas comenzamos a examinarlas en su conexión mutua, en su movimiento, desarrollo y mutación, entramos en el reino de las contradicciones. En la Naturaleza siempre hay algo que nace y se desarrolla, y algo que muere y caduca. La lucha entre lo viejo y lo nuevo, entre lo que muere y lo que nace, entre lo caduco y lo que se desarrolla, constituye la ley del proceso de evolución. Lenin llamaba a esta ley la médula de la dialéctica, puesto que descubre la fuente del automovimiento y del desarrollo de la materia, y puesto que estudiando los aspectos contradictorios de los objetos, las tendencias de desarrollo de esas contradicciones, conocemos los fenómenos en su nacimiento, evolución y muerte. La unidad de los aspectos contrapuestos no es una unidad inmóvil, sino sujeta a una lucha interna. Lenin señaló, que la unidad de los contrarios es una unidad condicional, temporal, relativa, y la lucha entre ellos, absoluta, como absoluto es el desarrollo, el movimiento. La unidad de los contrarios es al mismo tiempo su conexión interna, su penetración y su exclusión recíprocas, la negación mutua, la lucha. Los contrarios se excluyen y se penetran mutuamente en un solo y mismo tiempo. "Ambos polos de cualquier contraposición —lo positivo y lo negativo— son tan inseparables uno del otro como contrapuestos, y... no obstante todo su carácter contrapuesto, se penetran mutuamente" (Engels). El proletariado y la burguesía son generados por el modo capitalista de producción, en cuyos marcos están a tal extremo relacionados entre sí que sin alguna de estas clases no es posible el modo capitalista de producción; pero a la vez se excluyen uno al otro, llevan una lucha intransigente. En el dominio.de los fenómenos físicos, el ejemplo más nítido de la unidad de las tendencias contrapuestas es la atracción y la repulsión, indisolublemente relacionadas. El átomo, a la luz de la física contemporánea, es la unidad de partículas de carga positiva y negativa. Con su penetración recíproca determinan las propiedades físicas y químicas del átomo. La vida es también un proceso contradictorio. La extinción y la renovación constantes de las células es una condición de la vida del organismo. La vida es una contradicción que se crea y se resuelve incesantemente. Un enorme valor científico y práctico tiene la extensión de la ley de la unidad y lucha de contrarios al estudio de la vida social. La vida social dentro de la Sociedad de clases está llena de contradicciones y de lucha; las aspiraciones de unos miembros de la Sociedad marchan en dirección opuesta a las de otros. El marxismo ha demostrado, por primera vez científicamente, que la fuente de las tendencias contradictorias y de la lucha antagónica dentro de la Sociedad dividida en clases radica en la diferencia de situación y de condiciones de la vida de las distintas clases. El marxismo demostró que la lucha de las clases es la fuerza motriz de la historia en todas las Sociedades antagónicas. El marxismo-leninismo enseña que las contradicciones solo pueden ser resueltas mediante la lucha y no por el apaciguamiento de los contrarios. "La contradicción puede ser superada solo mediante la lucha por estos u otros principios" (Stalin). Los contrarios, existiendo temporalmente como unidad, en cierto grado de su desarrollo se transforman en extremos, cuando su coexistencia ya no es posible por más tiempo. El proceso de la división de la unidad en dos partes que mutuamente se excluyen, al desarrollarse y profundizarse, alcanza su punto más alto, llegando entonces el momento de la destrucción de lo viejo y el nacimiento de lo nuevo. Así, por ejemplo, la lucha entre el proletariado y la burguesía, constituyendo la contradicción interna inalienable de la Sociedad capitalista, culmina con la destrucción de la burguesía y el triunfo del proletariado. El capitalismo deja de existir y en su lugar adviene un nuevo régimen social, el socialismo. De la ley de la unidad y lucha de contrarios se sacan deducciones muy importantes para la política y la táctica del Partido del proletariado. Si lo decisivo en la superación de las contradicciones es la lucha entre los contrarios, está claro, por consiguiente, que el factor subjetivo, esto es, la conciencia, la organización y la Voluntad de los hombres tiene una gran importancia para alcanzar dicha superación. Quiere decir, que no hay que temer las contradicciones que surgen en nuestro camino, sino que hay que superarlas mediante la lucha. Si el proceso de desarrollo se efectúa como una lucha de las contradicciones y en su superación, "quiere decir que lo que hay que hacer, no es disimular las contradicciones del régimen capitalista, sino ponerlas al desnudo y desplegarlas en toda su extensión, no es amortiguar la lucha de clases, sino llevarla a término consecuentemente. Esto quiere decir que en política, para no equivocarse, hay que mantener una política proletaria, de clase, intransigente" (Stalin), Con la destrucción de las clases explotadoras y parasitarias en la U.R.S.S., desaparecieron también las contradicciones antagónicas. La Sociedad soviética se compone de dos clases amigas, de obreros y campesinos, y sus contradicciones económicas y políticas se van borrando, van desapareciendo. Las contradicciones del proceso de desarrollo tienen lugar también bajo el socialismo, pero tienen una diferencia de principio con las contradicciones antagónicas, su carácter es otro completamente distinto y otros son los métodos para su solución. Si en las anteriores formaciones económico-sociales, las contradicciones son resueltas mediante la lucha sangrienta, la lucha a muerte, puesto que existen clases interesadas en la conservación de lo viejo, bajo el socialismo y el comunismo las contradicciones son superadas sin dolor por la actividad consciente de la Sociedad, puesto que todos los hombres de trabajo de la Sociedad socialista están interesados en marchar hacia adelante 

*Diccionario Filosófico Marxista - Ediciones Pueblos Unidos, 1946.